Devolver el brillo al parquet con trucos caseros:

En internet podemos encontrar todo tipo de trucos para devolver el brillo al parquet. Desgraciadamente estos no siempre son muy eficaces, e incluso pueden ser catastróficos.

Como ejemplo usaré el último piso que hemos restaurado. Un parquet de roble español en damas.

Muchas personas nos recomiendan fregar el parquet con un chorrito de vinagre. También podéis encontrarlo entre los consejos de algún supuesto profesional de este gremio.

El vinagre es una disolución acuosa de ácido acético. Éste no es un ácido muy fuerte pero su uso continuado deteriora y estropea el parquet. En un principio ejerce un pulido que puede sacar algo de brillo, pero con el tiempo empieza a producir un grave deterioro.

Aspecto de un roble en damas estropeado por el uso de productos inadecuados.

En este piso la anterior dueña se dedicó a fregarlo con vinagre muy a menudo. Cuando vio que no le devolvía el brillo comenzó a utilizar todo lo que se le ocurrió, pero el principal daño lo causó la lejía.

La lejía es una disolución en agua de hipoclorito sódico, muy eficaz en la desinfección pero muy poco adecuada para la madera y el barniz. El efecto sobre la madera fue un inusitado envejecimiento. El aspecto aún después de haberlo lijado es el de una madera centenaria, cuando a penas tenía unas decenas de años.

El cuadrado más claro corresponde al lugar que ocupaba el tope de la puerta, donde la madera no pudo ser estropeada.

Otro error muy frecuente es devolver el brillo al parquet añadiendo ceras. Si en un primer momento parece dar muy buen resultado, con el paso de unas semanas ennegrece y queda horrible. Lo peor de todo no es eso. La cera y el aceite son contaminantes de la madera y aún después de lijar y barnizar pueden dar lugar a reacciones adversas en el barniz. Éstas reacciones son los famosos ojos o cráteres.

Cráteres en parquet contaminado por ceras. Se acumulan en las rajas y el poliuretano se retrae en el barnizado.

¿Entonces no hay una forma de recuperar el brillo? Pues si que las hay, pero os las debe recomendar vuestro profesional. Desde dar una mano de barniz hasta el uso de productos avalados por los fabricantes para este uso.

Dichos productos suelen contener un fundente y una ligera cantidad de barniz y son de aplicación sencilla. Cada marca de barniz tiene los suyos y son diferentes si el barniz es mate o posee brillo.

No dudéis en preguntarlo, pero desechad los trucos bienintencionados de vuestros amigos y familiares y los de los supuestos gurús de internet, que no tienen la menor idea de lo que están hablando. Uno incluso recomendaba dar aceite al barniz, cosa que se hace con los muebles. Y no cualquier aceite de cocina sino aceites de linaza cocida…

Me he encontrado casos de personas que habían limpiado con limpia-cristales, terrible.

Suelo decir a mis clientes que el barniz no se puede recuperar por medios caseros, solo se puede conservar el mayor tiempo posible tratándolo correctamente. Ésto consiste en limpiarlo con poca agua y con productos no agresivos para la madera y el propio barniz.