Por qué se despegan las tablas de mi parquet:

Varios clientes me han informado de que en sus parquets pegados, mejor dicho lamparquets, se despegan tablas con el paso del tiempo, sin haber sufrido una fuga ni tener humedades estructurales.

¿Cual es la causa?
La respuesta es casi siempre la misma: la cola utilizada en la instalación.
Antes de proseguir me gustaría indicar que me refiero a los pisos que acuchillo y barnizo, no a los que instalo, por supuesto. En los que instalo yo jamás se ha dado el caso. Con ello fácilmente se entiende que la cola empleada es primordial y que aparte de incidir en la duración, obviamente también se ha de notar en el precio final.

Existen diferentes colas, casi todas orgánicas. Dentro de estas existen tres tipos, animales, vegetales y resinas sintéticas, más modernas.

Las resinas animales y vegetales son antiguas y es difícil verlas en un piso. Son atacables por los microorganismos y se reblandecen y endurecen según la humedad.

Dentro de las resinas sintéticas encontramos los diferentes tipos de colas que se emplean en parqué pegado y multicapas:

-Colas de urea-formaldehido. No las he visto en suelos pero si en multicapas (parquet flotante) Es una cola que se usa para exteriores pues endurece en contacto con el agua, obteniéndose una unión extremadamente dura. En parquets flotantes, esta unión tan dura hace que en caso de fuga se despegue la capa noble. Es una vergüenza tener que ver cosas así.

-Melamina-formaldehído. Es una mejora con respecto a las anteriores pues resiste los cambios de humedad y temperatura. No se emplean en parquet pegado.

-Termoplásticas. En este grupo encontramos la cola de polivinilo, la más empleada en el pegado de parquet. Las colas termoplásticas resisten los cambios de humedad, estos no afectan a su estructura pero una humedad excesiva en la madera hace que esta crezca y que la madera se suelte en caso de fuga pues esta cola no es elástica sino dura. Otra causa de su poco éxito es que no es capaz de salvar alturas apreciables, merman en el secado y si una tabla no está bien asentada en el suelo, solo se pega por un extremo, y con el paso del tiempo las pisadas sobre ella hacen que se acabe rompiendo la escasa unión.

-Resorcinol y fenol formaldehído: no son de aplicación en el pegado en soleras. Se usan para estructuras de madera laminadas. Son extremadamente fuertes, sobre todo las segundas, cuya unión es prácticamente indestructible.

pegando damero de eucalipto blanco
pegando damero de eucalipto blanco cola poliuretanica-epoxy
En este caso el despegado de la cola se produjo porque los instaladores no quitaron la cera al terrazo antes de pegar. Mucha gente diría que este piso no tiene arreglo, pero si lo tiene. Es cuestión de trabajo y paciencia.

-Poliuretanos: son colas de unión muy duradera, impermeable, elástica y no atacable por los microorganismos. Es una cola muy adecuada para el pegado de madera a soleras y tiene la virtud de perder poco volumen en su polimerización (endurecimiento) lo cual las hace muy útiles en reparaciones, instalaciones etc…

-Silánicas (de xilanos) Son de creación bastante reciente, una variación de la formula de las siliconas. Son elásticas, salvan alturas, endurecen rápido, en definitiva, son muy adecuadas para pegar un parquet, pero solo deben barnizarse con poliuretanos al agua, aceites o ceras pues su cercanía química a las siliconas produce reacciones en los barnices tradicionales.

-Epoxy: el epoxy es una unión increíblemente fuerte y capaz de unir muy distintos materiales, incluso hormigón o metales. Su precio alto no permite encontrarlas más que en procesos muy específicos, en pegado de madera a soleras aún no , excepto en reparaciones de interés histórico-artístico.

Como expliqué antes, las colas más empleadas (más de un 95% de las veces, según mi experiencia) son las polivinílicas. Eso es una merma segura en la duración y calidad del encolado. Muchas tablas pegadas solo a medias, como comenté antes y escasa duración en caso de humedad pues al ser dura se casca fácilmente. A parte de esto decir que necesita soleras compactas pero porosas para comportarse bien. Sobre terrazo o cerámicas y gres tiene una escasa duración. Son adecuadas para hormigón compacto pero con una cierta porosidad, para permitir su agarre. Desgraciadamente las soleras de hormigón en nuestro país son excepcionalmente malas. Una solera para parquet de hormigón debería resistir que lo rayes con un destornillador sin que se desprendan fragmentos y comúnmente las rayo con las uñas, penoso. Lo más normal es que se arranque la capa más superficial de hormigón ante cualquier empuje, con lo cual una fuga no solo afecta a una zona, sino a todo el piso, un desastre.

Cola acetato poco eficaz en solera compactas
La cola polivinílica con la que se pegó este parquet se desprende de la loza e incluso de la madera en caso de fuga pues al ser dura es quebradiza y no arraiga bien en materiales poco porosos.  Para la reparación usamos cola de poliuretano o de silanos. Esos fragmentos blancos son la cola que ha de ser retirada de la superficie

Ante una solera no apta, debería el instalador de la madera, endurecerla, que se puede, o usar una cola más adecuada pero como no es un problema que surja inmediatamente, no suelen hacer ni una cosa ni otra y se ahorran un montón de dinero. Lo peor es que para evitar problemas encolan los cantos de las tablas. De esta forma si una tabla no está bien adherida al suelo, tampoco se hunde ni llama la atención. Indicar que esto es una barbaridad que prohíben las normas tecnológicas de la madera pero que se hace siempre por parte de los destajistas en obra. En caso de fuga, la zona dañada afecta al resto porque son todas ellas una pieza y el empuje de una afecta a todas, otro desastre. Los que sufrís las consecuencias sois vosotros.

Como es un problema que no tiene arreglo como tal, a no ser que las tablas se suelten y permitan ser «repegadas» con un adhesivo más adecuado, sólo podeis prevenirlo, no fregando con mucha agua y muy a menudo pues eso machaca el parquet y prestando la debida atención a partes de vuestra instalación de agua que podrían causar un potencial desastre como tomas de agua de lavadoras o juntas mal selladas en circuitos de calefacción, así como piezas de fontanería estropeadas.

Por supuesto a la hora de afrontar una nueva instalación de madera, optaremos por colas de poliuretano o silánicas.

Existen otras formas de pegado de parquet como el pegado sobre brea o algunos sistemas de encaje en mortero de cemento. Su duración es espantosa, se usaron en los sesentas  y alguno en los setenta, como los hidráulicos pero han resultado un fracaso estrepitoso.